viernes, 23 de diciembre de 2016

Obituario de don Javier Echevarría, El Padre.


Cuatro días antes de su partida al cielo, había estado hablando con un amigo acerca de don Javier Echevarría Rodríguez, Obispo Prelado del Opus Dei, quien en la festividad de la virgen de Guadalupe entregaría su alma definitivamente a Dios.

Conocí personalmente al Padre, como familiarmente se le llamaba, el martes 10 de mayo de 2004 durante un encuentro en Roma, previo a una audiencia en la cual podría saludar al ahora San juan Pablo II. En esa reunión, en la sala de su casa en Villa Tévere, acababa de iniciarse el día anterior el proceso de beatificación de Monseñor Álvaro del Portillo, su inmediato antecesor al frente de la Obra. Don Javier, tan afable como era, me dijo “vamos guapo, dame un beso” y siempre habré de recordar al darle el beso fraterno en la mejilla,  lo bien afeitado que estaba; es algo muy simple, pero me ha servido todos estos años para encomendarlo a diario mientras lucho con la afeitadora.

Lo vi de lejos cuatro veces en sus dos hondas y extensas catequesis y  visitas pastorales a Colombia en 2001 y 2015, pero sólo en abril de 2016 pude saludarlo de nuevo, otra vez en Roma, cuando me dijo “en la Universidad de La Sabana tenéis una gran labor apostólica que no podéis descuidar”; sin embargo, más allá de los dos saludos personales, en mi archivo, junto a una carta de Juan Pablo II, tres de Benedicto XVI y seis de Francisco, las de dos cardenales de Bogotá y cartas de cuatro obispos colombianos, están las diez cartas de don Javier, que comienzan en septiembre de 1996 y culminan en septiembre 22 de 2016, llenas de ese amor filial y sobrenatural que era lo suyo, e incluso, en la primera, se refiere al Cacique de Turmequé.

En esas cartas de familia, además de agradecerme siempre mis libros, ocasión de poner a Cristo en la cumbre del quehacer universitario, en el centro de los corazones de las mujeres y de los hombres de hoy,  me habla de nuestro trabajo bien acabado y del servicio a los demás en medio de las dificultades, de los cuales el Señor se sirve para que muchas personas encuentren la auténtica alegría de vivir en cristiano, seguros en la filiación divina y de las muestras de la predilección de Dios por cada uno de nosotros.


El Padre sintió siempre como propios los sufrimientos de cada colombiano, se solidarizó con cada uno, rezó por cada uno y siempre pedía por la paz de Colombia con gran esperanza y un gran sentido de responsabilidad.

La Constitución del Reino Mapuche de Araucanía y Patagonia



Se reeditó doce años después en el blog de los Doce Linajes de Soria, que cuenta con más de siete millones y medio de visitas al año:

http://www.docelinajes.org/2016/12/la-constitucion-del-reino-de-araucania-por-d-hernan-alejandro-olano-garcia/ 

Derecho y Debate # 27 - Perú; precedente jurisdiccional en Colombia

Los dos sistemas del precedente jurisdiccional en Colombia, un estupendo estudio del profesor doctor Hernán Olano en la revista Derecho y Debate http://derechoydebate.com/admin/uploads/585d960062889-hernan-olano-los-dos-sistemas-del-precedente-jurisdiccional.pdf 

martes, 20 de diciembre de 2016

El Reino de Épiro


Desde 1998, el Príncipe David de Épiro, designó como su Delegado en Colombia al profesor doctor Hernán Olano.
Enlace: 
https://realecasadiepiro.jimdo.com/delegazioni/ 

El doctor Hernán Olano en el Almanaque de Würzburg

https://youtu.be/PqkT3er05OM 
El famoso Almanaque de Würzburg recopila los nombres de las distintas Casas Resales, Nobles y Tituladas del Mundo y reemplazó al célebre Almanaque de Gotha cuya editorial y archivos fueron destruidos por los soviéticos en 1944.
En la Residencia de los Würzburg en Alemania, sin embargo se conservaban los archivos originales de muchas de esas familias nobles del mundo.
El Almanaque incluye las casas soberanas reinantes y no reinantes, la nobleza más alta y los nobles de muchas naciones. Aunque algunos revisionistas de la historia afirman hoy que los Almanaques originales, como el Almanach de Gotha, eran documentos legales, de hecho no lo eran. Eran simplemente una versión temprana de un "quién es quién" entre la realeza y la nobleza y servido sobre todo como registro social. El hecho de que un nombre o título no aparece en la lista a menudo habla mucho de la naturaleza mezquina de los editores y los partidarios de una publicación privada en una hipótesis vana de que los lectores encontrarán a los excluidos como algo menos creíble. Es una táctica de rutina que continúa hoy en internet, la versión actual del Oeste Salvaje. 
Para obtener más información, consulte: http://www.noblecompany.org/wurzburg/order.html  

viernes, 9 de diciembre de 2016

Colombia agredida

Colombia, un país agredido y humillado, es el nombre del estudio que efectúa el mayor del Ejército y abogado Hernán Arbeláez, en lo que viene a ser un nuevo libro de este oficial retirado, que ahora se dedica a la historia y al análisis de la seguridad geologística.

En nuestro empeño por el regreso de la enseñanza de la historia de Colombia al pensum escolar y universitario, necesitamos tener el contexto de los conflictos internacionales en los cuales el nombre de nuestra nación se ha visto comprometido. Arbeláez, con prólogo del general honorario Julio Londoño Paredes, nos hace un recuento de diversos episodios bélicos, algunos de los cuales también han sido enfrentamientos jurídicos y económicos, así como de otras angustias y dificultades que hemos debido afrontar para hacer respetar y asegurar nuestra soberanía.

Esta obra, que no sólo debe ser difundida y conocida en centros militares y estratégicos, sino en cualquier institución donde se profundice en el estudio del conflicto colombiano, recuerda la guerra con el Ecuador de 1832, el “Incidente Barrot”, que en 1834 enfrentó a las autoridades cartageneras con el cónsul francés; el “caso Russel” de 1836 entre Gran Bretaña y la Nueva Granada; el “caso Macintosh” de 1856, que enfrentó a nuestro gobierno con ese negociante inglés que había suministrado armas en 1821; el “caso Cerruti” de 1898, quien  aprovechando su cargo como cónsul italiano y ser nieto político de Tomás Cipriano de Mosquera, se dedicó al contrabando por Buenaventura.

En la obra de Arbeláez, también se habla de la “agresión norteamericana” por la separación de Panamá en 1903, por cuenta del general Esteban Huertas, natural de Úmbita, Boyacá, quien era el Comandante del Batallón Colombia en Panamá y apresó a los generales Juan B. Tovar y Ramón G. Anaya para neutralizarlos y, por cuenta de eso, recibió treinta mil dólares con los cuales se fue a vivir en Nueva York. Se incluye como curiosidad, que en la partida de nacimiento de Huertas, que data del 30 de mayo de 1869, el párroco de Úmbita anotó: “Traidor a la patria. Vendió el istmo de Panamá en 1903. Con el producido de su traición vive holgadamente en Nueva York”.


También hay cuenta de las agresiones peruanas con la invasión de “La Pedrera” en 1911 y la guerra de 1832. Igualmente hay un relato acerca de la agresión de la Alemania nazista a Colombia y nuestra declaratoria de “estado de beligerancia” el 27 de noviembre de 1843. Es decir que no fue una declaratoria de guerra, lo cual le quiero aclararle a un Ex Fiscal General de la Nación con quien recientemente tuve una controversia sobre el particular.

El protector indígena de nuestros Derechos Humanos


El verdadero protagonista de la historia española en América fue el indígena, Diego de Torres y Moyachoque, nacido en Tunja en 1549; era de ascendencia española por parte de su padre, el adelantado Don Juan de Torres, pero, por línea materna era hijo de una princesa chibcha: Catalina de Moyachoque, hermana mayor del Cacique de Turmequé y tenía una formación básica propia de su condición. Heredó sin embargo el título de Cacique y, a la muerte de su padre, la Encomienda de Turmequé, así ostentaba las dos jefaturas, hispánica y chibcha del territorio de sus ancestros, hasta el enfrentamiento con su hermanastro español.
En los mismos días, la Corona, teniendo en cuenta los serios inconvenientes reportados por la distancia y las múltiples diferencias culturales, se promovieron algunas leyes que no obstante, buscaban identificarse con los indios y defenderlos, reconociendo en ellos una debilidad de origen, su degradación social y la insistencia de algunos españoles en repetir desafueros, a pesar de ser moralmente condenados, y desobedecer las instancias ordenadas por el Rey y el Consejo de Indias respecto a los indios. Las Leyes de Indias y los Cedularios son las fuentes disponibles más importantes para conocer el alcance de la política española en su esfuerzo por organizar a estas poblaciones en el contexto de la sociedad política americana. La idea consistía en tratar de conciliar mundos sociales y políticos enfrentados, pero al tiempo integrado en el propósito de encontrar un equilibrio definitivo apto para la vida en común de sus gentes.
El Cacique de Turmequé fue el primer cartógrafo colombiano, dibujó el mapa de las provincias de Tunja y Santa Fe; también el primer promotor de los Derechos Humanos, pues le propuso al rey Felipe II, viajando a España para ello, la creación de la figura del Protector General de los Indios, una institución que antecedió desde el siglo XVI la figura del defensor del pueblo.

Diego de Torres y Moyachoque murió en Madrid, reivindicando ante al Corona española los derechos de la raza que representaba.

Bolívar y el medio ambiente


Hace casi dos siglos, el Libertador Simón Bolívar con una visión infinita del futuro contempló la situación del medio ambiente de los países por él libertados, y pensando siempre en la imperiosa necesidad de proteger y conservar los recursos esenciales para la vida humana, consagró en forma positiva las medidas tendientes a la preservación y defensa de los recursos naturales, a fin de crear una conciencia colectiva, para que todos los habitantes de las Repúblicas nacientes se preocuparan por respetar y cuidar la naturaleza, y además aprendieran a quererla.

Luchaba Bolívar desde entonces para que el hombre se reconciliara con la naturaleza, demostrando ampliamente con su acción, cuan inmensa debería ser la responsabilidad de los gobiernos, de los dirigentes y de cada ciudadano, para prevenir y evitar el deterioro del medio natural, que sin duda es la fuente primordial del bien común.

Tuvo por consiguiente, Bolívar, desde un primer momento una conciencia diáfana sobre la importancia de la naturaleza, convirtiéndose en defensor implacable de los recursos naturales que él consideraba vitales para la supervivencia del hombre. Luchó porque éstos se utilizaran en forma racional y óptima, para evitar el deterioro del medio ambiente y la consecuente escasez de elementos esenciales para un desarrollo equilibrado de los seres humanos.

El aprecio que Bolívar tuvo por el agua, elemento por él considerado como una de las bases fundamentales de la vida, lo llevó a expedir normas para que se aprovechase racionalmente el agua existente mediante represas, acequias, acueductos, fuentes y manantiales a través de una meditada política de reforestación. Recordemos simplemente para apoyar esta interpelación, el artículo segundo de su Decreto de 19 de diciembre de 1825, expedido en Chuquisaca, que decía así:

Que en todos los puntos en que el terreno prometa hacer prosperar una especie de planta mayor cualquiera, se emprenda una plantación reglada (es decir sistemática) a costa del Estado, hasta el número de un millón de árboles, prefiriendo los lugares donde haya más necesidad de ellos”.

Agregando, Que la esterilidad del suelo se opone al aumento de la población y priva entre tanto a la generación presente de muchas comodidades”.

También como lo advertía Bolívar en aquella época “Que por todas partes hay gran exceso en la extracción de maderas, tintes, quinas y demás sustancias, especialmente en los bosques pertenecientes al Estado, causándole graves perjuicios”, nos induce a reflexionar sobre la realidad colombiana, ya que en forma dramática nos estamos quedando sin agua pura, sin flora y sin fauna y con el agravante de que el Estado, pero en especial los particulares, a pesar de la legislación ambiental tan completa y avanzada, siguen transgrediendo el medio ambiente, violando el principio de solidaridad social y haciendo lo posible para no evitar que en un futuro próximo nos veamos abocados a una catástrofe ambiental sin precedentes.

Las normas conservacionistas dictadas por Bolívar estaban impregnadas de un criterio eminentemente prospectivo y ciertamente se adelantaban a su tiempo para señalar caminos a las generaciones futuras.

Hago referencia a ellas, porque fueron regulaciones orientadas a asegurar la perdurabilidad de los recursos naturales para así proporcionar una verdadera calidad de vida, buscando un equilibrio de las necesidades entre los hombres y una armonía entre la naturaleza y el hombre, planteando desde entonces un crecimiento sin destrucción, un desarrollo sin aniquilar el medio, manteniendo un ambiente sano  que permita alcanzar el pleno desarrollo y enriquecimiento de las potencialidades vitales del hombre.


Ciertamente, los decretos dictados por el Libertador en relación con la defensa de los Recursos Naturales, se constituyen en el primer antecedente jurídico ambiental de nuestro medio, que sin lugar a dudas influyó en el desarrollo de la actual legislación ambiental colombiana.

martes, 6 de diciembre de 2016

¿Cómo enseñar derecho?

Fuente: http://www.larepublica.co/%C2%BFc%C3%B3mo-ense%C3%B1ar-derecho_449201

La enseñanza del Derecho por competencias, especialmente en procesos de diseño curricular, es una exigencia para que como profesores podamos aplicar en nuestras asignaturas. Y es que las competencias, según Levy-Leboyer, son “repertorios de comportamientos que algunas personas dominan mejor que otras, lo que las hace eficaces en una situación determinada”.

Es decir, se busca basar la docencia en el aprendizaje, no en la enseñanza, por tanto, el concepto de educación por competencias relaciona toda actividad académica con el desarrollo de ciertos perfiles que se consideran necesarios para cada una de las diferentes profesiones o carreras que se estudian en las universidades del mundo. Los programas de estudio y la metodología pedagógica, deben estar dirigidas a la formación del nuevo profesional de acuerdo a las competencias requeridas por su carrera. Mi propuesta, para la enseñanza del Derecho por competencias, se basa en 16 puntos:
 i) Actúa en forma ética y transparente con responsabilidad social, buscando de manera leal y eficiente la justicia y la equidad en sus actuaciones, para defender adecuadamente los intereses de quienes representa.
ii) Actúan con capacidad jurídica, con el apoyo técnico necesario para ejercer el debido proceso, razonado y con argumentos, ante autoridades judiciales o administrativas.
iii) Conoce, interpreta y aplica los principios generales del Derecho y del ordenamiento propio de su país, así como las diferentes normas del sistema jurídico nacional e internacional.
iv) Posee capacidad para dialogar y debatir desde una perspectiva jurídica y con conciencia crítica, comprendiendo las distintas teorías y conceptos, jurídicos y filosóficos del Derecho, con el efecto de articularlos y proponer y tomar una solución jurídica razonada.
v) Posee capacidad para decidir si las circunstancias de hecho son suficientemente claras para poder adoptar en Derecho una decisión bien fundada.
vi) Considera la importancia  del uso de los Medios Alternativos de Solución de Conflictos.
vii) Posee capacidad para redactar textos y expresarse de manera adecuada en forma verbal y escrita con un lenguaje fluido y técnico-jurídico, así como con una adecuada gramática acorde con las actualizaciones idiomáticas recientes.
viii) Es capaz de enfrentar nuevas situaciones y de contribuir a formular soluciones jurídicas.
ix) Posee capacidad para aplicar sus conocimientos de manera eficaz en un área determinada de su profesión.
x) Posee capacidad para analizar una diversidad muy amplia de trabajos complejos en relación con el Derecho y de sintetizar argumentos.
xi) Comprende adecuadamente los fenómenos políticos, sociales, económicos, personales y psicológicos -entre otros-, considerándolos en la interpretación y aplicación del Derecho.
xii) Posee capacidad de ejercer su profesión trabajando en equipo, bien sea con colegas o con expertos de otras carreras, contribuyendo de manera efectiva en la solución de casos.
xiii) Posee capacidad para ejercer la investigación científica en su actividad profesional.
xiv) Posee capacidad para utilizar la tecnología, así como los avances de ésta, en la búsqueda de la información relevante para ejercer su carrera, así como para actualizarse profesionalmente.
xv) Conocer al menos una lengua extranjera distinta a la materna, que le permita actuar eficientemente en el ámbito jurídico.
xvi) Está comprometido con los Derechos Humanos y con el Estado Social y Democrático de Derecho. 

jueves, 1 de diciembre de 2016

Videos sobre el Re Acuerdo de Paz del Teatro Colón

El doctor Hernán Olano grabó siete (7) videos nuevos sobre el Re-Acuerdo de Paz, disponibles en Youtube.
a. Reforma Rural Integral: https://www.youtube.com/watch?v=E82ZFQ6jTOw
b. Participación Política: https://www.youtube.com/watch?v=sAkPqIFONiU
c. Drogas ilícitas: 
d. Implementación - ideología de género: https://www.youtube.com/watch?v=4a7gQ4K5t7c
e. Implementación - verificación: https://www.youtube.com/watch?v=21EvVNjaXJg 
f. Justicia de Paz y víctimas: https://www.youtube.com/watch?v=wMbbWnRCy6k